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Eterno Amor

En la dulce sensación de rozar tu piel
Acariciando mis sueños… despierto
Jugando con tus cabellos me quedo dormido
Ya no miro al pasado… el futuro a tu lado es mi delirio

Susurro en el viento que te quiero
Y canto en silencio a tus desvelos
Me siento un niño y no lo creo
Mis manos acariciando, descubriendo algo nuevo

Corro… me detengo; Me siento vivo,
Miro el presente que es solo mío
Tu sonrisa se dibuja en la mañana
Y me susurra lo que tanto he pedido

Espero un instante… y de nuevo respiro
Quizá es más que un sueño
Eres lo que tanto he querido
Me llevas al cielo… lugar que por ti he conocido

Eres el canto que puedo interpretar
Las líneas encontradas en el tiempo
Aquellas palabras presagio de un negado olvido
De un eterno amor… el tuyo y el mío.

Comentarios

  1. El corazon late a mil por hora penetrandose en las maravillosas palabras del poema... dignas de admirar...
    FELICITACIONES!!! TIENES UN DON QUE DEBES APROVECHAR...

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En agonía

He dejado mis intenciones de escapar en evidencia, He marcado mi rostro con las huellas del olvido y el desdén, Quizá ya no me importa lo que siento, Quizá ya perdí las esperanzas y hasta el último aliento. Hoy encuentro entre mis manos el vacío… El frio de aquel nido… tuyo y mío, Testigo mudo de mil sueños y un suspiro Que se han esfumado con el viento y sin destino. Caminaba… por así decirlo entre mi vida, A este apaciguar menguante de mis días, Mirando cada etapa como una sombra que se escurría, Entre llantos, un café y una ironía… Si alejarte da el sentido a tu vida, Ve tu sola y no te lleves a la mía… Déjame encontrar la razón a tu partida, Entre los recuerdos causantes de esta agonía.

Adiós

Quisiera ser parte de tu pensamiento… Y dejar de sentarme en el deseo, Esperando el anuncio arrebatado, De una oportunidad… Miré las estrellas encenderse, Cual idea a un pensador, Maquinando los poemas que escribían, Las frases que pertenecen a un pecador Sé que no existe nada que te pueda arrebatar del altar, Al cual extraña a mis deseos has de llegar, Pero aún suspiro, Por ser aquel, a quien jures tu amor. Las horas van pasando… Y de mis manos sale el dolor, La impotencia conjugada en un adiós, Va camino a las cadenas, Que matan este amor. Sé que es tarde para pedir perdón, Que mi equivocación está dictada, Y será una bendición… La que te aleje del que pudo ser tu gran amor.